Trabajo en equipo y cohesión grupal
Como decía el filósofo griego Esopo: “la unión no hace tan fuertes como débiles la desunión”. Y es que la cohesión grupal es el pilar más básico por el que hay que comenzar a trabajar en deportes de equipo. Yo incluso, añadiría que en deportes individuales, pero que se entrenan en grupo también lo es. Hay momentos en los que competimos por parejas o en relevos, por ejemplo. O simplemente el hecho de estar juntos como club nos hace más fuertes y mantiene el respeto cuando en lugar de compañeros nos convertimos en rivales.
El trabajo en equipo se basa en:
- Un objetivo común que todos los integrantes del grupo persigan.
- Un conjunto común de actitudes, normas y valores respetados por todos los miembros.
- Una interacción correcta entre los miembros, pues la conducta de cada uno de ellos afecta a la totalidad del grupo.
Para formar un equipo cohesionado hay que conocer las fases fundamentales por las que pasa un grupo de trabajo, pues éste no se crea de la noche a la mañana. Conocerlas permite poder trabajar en ellas, acelerando cada etapa hasta llegar a la etapa final. Estas son las 5 etapas por la que pasa un grupo:
- Etapa de formación: el grupo está formándose, los jugadores no se conocen aún en profundidad y la incertidumbre reina en esta época. No saben cómo son los demás, cómo es el entrenador y qué se espera de ellos.
- Etapa de establecimiento de normas: es una etapa fundamental pues si no existe, el grupo no sabe a qué atenerse. Cuando más claras estén puestas las normas desde el inicio, mejor. Otras, podrás ser consensuadas de forma que se fomente la cooperación y la implicación del grupo.
- Etapa de solución de conflictos: es normal que surjan algunas dificultades durante la formación del grupo. Somos personas, cada una diferente a la otra y encajar y tener claro cuál es el papel de cada uno es fácil. Aquí, la habilidad del entrenador para resolver los conflictos y encauzarlos en imprescindible.
- Etapa de eficiencia: en la que el equipo funciona a pleno rendimiento, todos hacia el mismo objetivo, asumiendo cada uno su responsabilidad.
- Etapa final: todo llega a un fin, y se percibe cómo al final de la temporada hay un cambio de actitud de los deportistas. Hay veces que puede haber mucha motivación y empuje por conseguir los resultados, pero tras veces podemos encontrar cansancio o desmotivación. Reconducir al grupo de nuevo hacia la eficiencia es labor del entrenador junto al psicólogo deportivo.
Además, en cada una de estas etapas la psicología deportiva puede ayudar al grupo a:
- Mentalizarse de cara a los partidos.
- Fomentar la responsabilidad de grupo.
- El liderazgo de los capitanes.
- Solucionar problemas en el vestuario.
- Potenciar la eficacia del jugador individual en pos del trabajo grupal.