En el deporte se objetivo.

Los deportistas se mueven por sensaciones. Muchos de los que acuden a mi consulta en busca de preparación psicológica lo hacen. Cuando les pregunto qué tal ha ido la competición, me suelen contestar: “mal, me sentía súper pesada, las piernas no me respondían” o “ha sido catastrófico, he fallado en el primer viraje y a partir de ahí iba muy lento”. Igual ocurre en los entrenamientos. Sus conclusiones son buenas o malas según se hayan sentido rápidos, ligeros, pesados o bloqueados y en función de ello, se siente eufóricos o con posibilidades o tristes y desmotivados.

Las sensaciones en el deporte son muy importantes, por supuesto. Pero dejar tu satisfacción exclusivamente en esas manos es algo muy peligroso. Y peor aún si lo que dejas es tu confianza. El deporte es principalmente resultadista, pero nos fijamos en los resultados solo cuando nos conviene y de la forma en la que nos conviene. ¿Por qué no somos verdaderamente objetivos?

Veamos a qué me refiero con todo esto:

  1. Tienes que medirte de forma objetiva: puede ser que te hayas encontrado muy lento y pesado, pero ¿has comprobado cuál ha sido exactamente el tiempo que has obtenido? Parece increíble, pero hay muchos deportistas que no recuerdan sus tiempos (es cierto que a veces son muchos números que recordar) y por tanto, su satisfacción no es objetiva.
  2. Has de ser realista en cuanto a los tiempos o los resultados obtenidos. Muchas veces nos quedamos tristes porque esperábamos hacer un tiempo concreto en una competición pero no hemos tenido en cuenta cuál fue nuestro último tiempo en esa modalidad. Un ejemplo: si eres nadador, da igual que hayas subido unas milésimas en los 200 estilos si hace dos años que no compites en esa modalidad. La forma de enfocarlo es que estás desentrenado. Plantéate: ¿qué pasaría si compites en un mes esa misma modalidad? Seguro que mejoras, has vuelto a coger experiencia y te has entrenado para ello. No hagas de esa milésima una catástrofe.
  3. Ten en cuenta tus circunstancias reales: no tendrás los mismos resultados si es el inicio de la temporada, si vienes de una lesión o si has subido de categoría y ahora te enfrentas con deportistas con más experiencia. Esto último es especialmente importante. Muchos de los jóvenes deportistas que tienen presión vienen de haber sido los mejores y ahora han subido o cambiado de categoría o club; no obtienen tan buenos resultados como antes y se viene abajo. No hay que olvidar que ahora te mides con una escala diferente. Parte de cero y céntrate en tu mejora.
  4. Mira hacia arriba, pero no olvides mirar hacia abajo: si sigues quedando siempre en el segundo puesto, entiendo que sea frustrante. Pero, ¿te has parado a pensar cuántos, al mirar hacia arriba, te ven a ti? Puede ser que siempre haya alguien mejor que tú, pero eso no te hace mal deportista ni te quita valor.
  5. Elige con quien te comparas: medirse exclusivamente con los que están en la élite no te ayudará. Lo importante es tu propia evolución. Si no mejoras, entonces sí que debes preocuparte.

 
Zoraida Rodríguez Vílchez
@ZoriPsicologa para IDEAL Granada

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Post relacionados

Autolesiones en adolescentes, cómo ayudarles

La adolescencia es un periodo de transición, algunas veces difícil, marcado por cambios físicos, emocionales y sociales que pueden suponer un gran desafío para los adolescentes y la propia familia. Uno de los problemas más preocupantes son las autolesiones. Aunque no se trata de un problema bastante frecuente, debido a la gravedad, dejamos en este … saber más

Recuperando la chispa: Terapia para revitalizar tu relación

Un gran porcentaje de la población vive en pareja y es muy común oír en parejas que llevan unos años juntas, que están sumidas en la rutina y que la “chispa” se ha ido perdiendo. Seguro que en alguna ocasión te has podido sentir así con tu pareja y solemos sentir mucha frustración ante este … saber más

Coaching y psicología, ¿para qué sirven?

Últimamente hemos oído mucho la palabra “coaching”, incluso en la tele, en donde famosos cantantes haces de “coach” y enseñan a los concursantes a sacar la mejor versión de sí mismos. Y es que el término viene del inglés coach que significa entrenador. Todos sabemos qué hace un entrenador. Si nos remontamos aún más atrás, … saber más

¿Cómo abordar la excesiva tristeza en la infancia?

Las emociones son algo universal, que todos poseemos, independientemente de la edad, género, lugar de procedencia, etc. En el post de hoy vamos a centrarnos en una de las emociones básicas, la tristeza. Además, vamos a centrarnos en su papel en la infancia y cómo gestionarla. La tristeza aparece ante situaciones de pérdida, por ejemplo, … saber más

Para qué sirve la tristeza

Si preguntáramos a nuestros conocidos y amigos cuál es la emoción que menos desean tener y de la que antes quieren desprenderse cuando la sienten, la mayoría de ellos dirían que esa emoción es la tristeza. Es más, tampoco nos gusta verla y es frecuente que cuando nos encontramos a alguien triste, evitemos a esa … saber más

Quererte tu primero para querer a alguien

Aprender a estar solo ¿Qué hay que hacer para querer a otros y a nosotros mismos? Si no te amas a ti mismo es imposible querer de verdad a alguien, lo que harás es necesitarlo. No es amor, es dependencia emocional. ¿Por qué esto es así? Si no te quieres a ti mismo… No te … saber más