Tú puedes ser tu mayor enemigo

¿Quién no ha sentido esto alguna vez? No hay nada ni nadie que nos impida lograr aquello que nos proponemos y sin embargo, al final fracasamos y dejamos escapar esa oportunidad, ese sueño. Y lo peor, es que esta tortura se repite. Tenemos el talento, los conocimientos, las habilidades, la situación ideal… y la cabeza nos traiciona.

En esos momentos, no sabemos muy bien porqué pero sentimos que de alguna manera perdemos el control y todo se nos escapa de las manos. Pueden ocurrirnos tres situaciones:

  1. Nos ponemos nerviosos y actuamos de forma prematura, anticipada o hablamos sin pensar para después arrepentirnos de habernos precipitado.
  2. Nos bloquemos y actuamos más tarde de la cuenta, dejando escapar el preciso instante en el que si hubiéramos sido más decididos, hubiésemos alcanzado nuestro objetivo.
  3. Fallamos, bien porque vacilamos o porque no somos precisos y actuamos de forma incorrecta.

En psicología del deporte, se habla de la imposibilidad de definir o cerrar el partido cuando se dan estas circunstancias. Y el tema se ha puesto sobre la mesa tras unas declaraciones de Sergio García, el Niño. Acaba de tener una ejecución espectacular en el Máster de Augusta, en donde el año pasado declaró que no era “lo suficientemente bueno para ganar un grande”. Pero hemos de ser sinceros y reconocer que este “síndrome” no ocurre solo en nuestra faceta deportiva. En el trabajo, continuamente nos torpedeamos y no logramos ese ascenso, ese proyecto o… simplemente hacer bien esa entrevista que tanto esperamos. En lo personal, nos lleva a no atrevernos a buscar lo que nos merecemos, a acercarnos a esa persona que nos gusta… Nos limita.

¿Cuál es la base de esta predisposición a torpear nuestros sueños? Principalmente la ansiedad producida por enfrentarnos a una situación que nos produce miedo o respeto. Quizás creemos que no somos lo suficientemente buenos o que no nos lo merecemos. Puede ser que nos exijamos demasiado a nosotros mismos y que cada cosa que hacemos la criticamos continuamente y nunca nos parece digna de alabar.

Si alguna vez has sentido esto, cambiar la situación está en tu mano. Tu eres el que puedes dirigir tu atención hacia tus logros, darte cuenta de que eres bueno, lo suficiente para conseguir lo que te propones. Si te resulta difícil al principio, puedes preguntarle a la gente que te rodea cuáles son tus cualidades y fortalezas. Muchas veces damos más credibilidad a la opinión de los demás. Después, ve anotando cada día cuáles son tus pequeños logros (no tienen que ser grandes hazañas, ¿eh?): corregir un pequeño fallo o fomentar tus pensamientos positivos, ¡es de admirar! Trabaja también tu pensamiento, la forma en la que interpretas todo lo que te rodea será determinante para corregir esta situación. Y ten pon bandera esta idea: ¿no crees que la vida ya se encargará de ponerte suficientes dificultades?, ¿no crees que tus rivales o los demás ya procurarán dificultarte el camino?; entonces, ¿qué sentido tiene que seas tu peor enemigo?

61_artculo30_ideal

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Post relacionados

Cómo ayudar/motivar a mi hijo a venir a terapia

Ser padre y/o madre no es una tarea fácil, de eso no cabe duda: nadie nos enseña cuándo, dónde, qué y cómo. La realidad es que ser padre/madre implica estar inmerso en el método ensayo-error, donde debes ir poco a poco descubriendo sus necesidades y la forma de suplirlas. No obstante, hay veces que una … saber más

¿Por qué decimos “estoy bien” cuando no lo estamos?

Por desgracia, es una estrategia que utilizamos muy a menudo. ¿Sabes qué razones he escuchado yo en consulta para decir “estoy bien” cuando en el fondo no lo estamos? Fingir que todo está bien • Creencia social de que “hay cosas que deben guardarse para uno, que son privadas, los trapos sucios se lavan en … saber más

¿Deben elegir los niños su deporte?

Los padres queremos lo mejor para nuestros hijos, y a la hora de elegir su deporte, intentamos ofrecerle aquel que, basados en nuestras propias experiencias, creemos que mayor bienestar le va a reportar. Cuando nosotros hemos practicado un deporte concreto solemos intentar que nuestro hijo se apunte a ese mismo. Hasta ahí todo normal, lógico … saber más

¿Qué tipo de entrenador eres?

¿Te has preguntado alguna vez qué tipo de liderazgo ejerces con tu equipo o con tus deportistas? Eres un entrenador autoritario si: Eres el que toma todas las decisiones sin pedir opinión a tus jugadores y además, esperas que esas decisiones sean obedecidas por encima de todo. Cualquier pregunta, o sugerencia, la interpretas como un … saber más

De dónde viene la autoestima

La autoestima es la opinión que tienes de ti mismo, cuánto crees que vales y cuánto te quieres. Muchas personas necesitan aumentar su autoestima, piensan que no se merecen los elogios, incluso que los demás están siendo falsos con ellos; o se sienten inferiores o incapaces de conseguir nada. ¿De dónde proviene la autoestima?, ¿es … saber más

Me enfado demasiado

Todo el mundo se pone furioso de vez en cuando. De hecho, tan común es esta emoción, que tenemos numerosas formas para describirla: irritación, furia, ira, molestia, enojo… Lo malo es cuando lo numeroso no son la cantidad de sinónimos que existen sino las veces que la sentimos. Hay personas que se enfadan continuamente. La … saber más