Tengo insomnio: ¿qué puedo hacer?
El insomnio es uno de los problemas más frecuentes entre la población. Asociado principalmente a trastornos como la ansiedad y la depresión, el insomnio frecuentemente está relacionado con dos tipos de problemas: preocupaciones y malos hábitos.
Tras el ritmo frenético que llevamos durante la jornada laboral, llegamos a casa y está todo sin recoger, los niños alterados, o nos bombardean con miles de WhatsApp a cerca de más problemas laborales, familiares o incluso, relacionados con nuestros hobbies o deportes. Cuando conseguimos medio encaminar todo y vamos a la cama, en un intento y deseo de recuperar cierta paz, ahí llega tu cerebro y te dice: “¿Creías que habíamos terminado? Espera que ahora te voy a recordar todo lo que está aún pendiente por hacer, las cosas que pueden salir mal o lo que ya no tiene solución”. En definitiva, aparecen las preocupaciones.
En otras ocasiones, el problema del sueño viene originado por malos hábitos. Hay quien hacer deporte a última hora del día le activa demasiado, quien no controla el exceso de café o simplemente, que asociamos la hora y el lugar de ir a dormir con todo, menos dormir. ¿Qué quiero decir con esto? Muchas personas usan la cama para trabajar, comer, ver la televisión o es el lugar de discusión con la pareja. No asocian la cama con descansar, porque estas actividades les activan, y cuando intentan dormir, encima, les asaltan las preocupaciones y la cama se convierte en ese maldito lugar en el que sé que lo voy a pasar mal, no concilio el sueño. Por tanto, voy retrasando cada día más la hora de ir a la cama y más ansiedad me genera ese momento.
¿Qué puedes hacer para combatir el insomnio?
Utiliza la técnica del control de estímulos:
- Acuéstate sólo cuando tengas sueño.
- No uses la cama para otra actividad que no sea la de dormir (o mantener relaciones sexuales).
- Si no concilias el sueño, levántate y vete a otro lugar de la casa que sea aburrido. Puedes volver a la habitación sólo cuando te de sueño.
- Esto se puede repetir tantas veces como sea necesario.
- Levántate siempre a la misma hora (incluidos fines de semana).
- No duermas siesta durante el día.
Además, la ayuda de un profesional te puede ser de gran utilidad, pues trabajarás para aprender:
- Técnicas de relajación, que te ayuden a desconectar tu cuerpo y tu mente, y te acerquen a ese estado de relajación cercano al sueño.
- Resolver esas preocupaciones, afrontar los problemas que te quitan el sueño o aprender a dejar a un lado, aquello que ya no tiene solución, parando esos pensamientos obsesivos que te atormentan.
- Reestructurar esos pensamientos negativos e irracionales que te hacen ver todo negro y magnifican las preocupaciones.
- Fomentar tu bienestar, pues todos tenemos problemas, pero sólo si nos enfocamos a lo positivo que tenemos, podremos conciliar nuestro sueño.
Zoraida Rodríguez Vílchez
www.zoraidarodriguezvilchez.es
@ZoriPsicologa para IDEAL Granada
Contenido supervisado por Zoraida Rodríguez, directora de Zoraida Rodríguez Centro de Psicología.
Zoraida es una psicóloga sanitaria especializada en adultos desde 2005, con experiencia en temas como dependencia emocional, pareja, autoestima, depresión, trastornos de ansiedad y TOC, apoyo a la infertilidad y opositores. Además, cuenta con una acreditación en psicología deportiva y ha trabajado con equipos y deportistas de diferentes disciplinas. Actualmente trabaja en su propia consulta en Granada, involucrada en proyectos interesantes y entregando lo mejor de sí misma para ayudar a sus pacientes a lograr sus metas. Colegiada nº AO05484.